sábado, 22 de marzo de 2008

100 días después

Frente a la ventana, contemplo cómo la lluvia golpea contra los cristales. Hace frío y el vapor de la taza de té empaña mis gafas. Escucho a Alicia Keys y recapitulo. Descubro a golpe de calendario que ya hemos superado una fase sustancial del reto.

La edición electrónica del diario funciona. Ha adquirido su propio impulso. Después de rebasar la barrera de los 100 días, la experiencia es muy positiva. El proyecto nos ha exigido muchas horas de trabajo, esfuerzo y compromiso. Pero ha merecido la pena.

No ha resultado un camino de rosas. En nuestro itinerario, se han colado espinas que, a mi juicio, hemos solventado con dignidad y eficiencia. Las elecciones del 9M supusieron una dificultad añadida. Políticos, chats, reportajes, debates...

Hoy todo eso ha pasado. Rápido. Aunque en nuestro paladar se mantiene el sabor del trabajo bien hecho.

viernes, 7 de marzo de 2008

Los terroristas revientan las elecciones

A las 13.30 horas, tres detonaciones segaron la vida de un ex concejal socialista en Mondragón y dinamitaron dos vibrantes (y agotadoras) semanas de campaña. A menos de 48 horas para que los colegios electorales abran sus puertas, el escenario político es una incógnita. Una lotería.

Las encuestas y sondeos se han tornado en papel mojado desde la trágica irrupción de ETA. Con una estrechísima diferencia en voto estimado, los partidos eran conscientes de que cualquier mínimo detalle podía desequilibrar la balanza. Los terroristas también. Por eso han hecho valer esta sobrevenida capacidad de influencia y repercusión mediática para apretar el gatillo.

Abierta la caja de Pandora, vaticinar un resultado es una quimera. Aunque sí resulta más plausible adivinar tendencias. Siguiendo la lógica de la solidaridad con las víctimas, el PSOE debería salir reforzado. Más si cabe, cuando la agresión demuestra que el Gobierno nunca ha cedido a las presiones de la banda terrorista. Se desmonta así la campaña argumental del PP, que ha cuestionado durante toda la legislatura la posición conciliadora del Ejecutivo en materia antiterrorista.

Las excepcionales circunstancias en las que se ha producido el asesinato podrían cambiar, sin embargo, el curso de los acontecimientos. Llega, como se ha apuntado, después de una tregua muy castigada por el principal grupo de la oposición y a pocas horas de unos comicios generales.

¿Revés socialista?
El terrible asesinato podría representar, de hecho, un revés para las aspiraciones socialistas. Una losa especialmente notable en aquellas autonomías de prevalencia conservadora. Madrid es el ejemplo más evidente. Aumentan las expectativas para el partido de Rosa Díez, que arrebataría al menos un diputado a la izquierda con un mensaje de crítica frontal hacia la política antiterrorista de Zapatero.

También podrían peligrar los progresos del PSOE en las dos Castillas, donde esperaba hacerse con algunos escaños dubitativos. Según las principales encuestas (El Mundo, El País, Público), la pugna en Ciudad Real, Toledo, Valladolid, Palencia, Salamanca y León continuaba abierta en la recta final de campaña. También en la Comunidad Valenciana, con dos diputados en disputa, y Murcia, que aumenta en 2008 su peso debido al crecimiento demográfico.

Por contra, el apoyo al PSOE se incrementará a buen seguro en sus feudos tradicionales, donde, por otra parte, el margen de mejora es ya escaso. Así, Cataluña y País Vasco podrían resultar decisivos, al igual que Galicia y Andalucía. Todas estas autonomías suministran un buen número de escaños a los de Ferraz y ya fueron vitales en 2004.

Parece evidente que los grandes perjudicados serán, de nuevo, los partidos nacionalistas. El trasvase de votos que desde estas formaciones se ha venido constatando a lo largo de la campaña podría acentuarse el domingo. No en vano, el temor ante un hipotético auge popular y el respaldo a la política negociadora de Zapatero (que en estas comunidades cuenta con una aprobación superior a la del resto del país) son dos argumentos que acreditan esta tendencia.

El movimiento de sufragios tendrá una mayor incidencia en el grupo de indecisos, donde el PP podría 'pescar' nuevos electores. Resta por ver qué capacidad de aglutinar votos de centro-centro izquierda (descontentos con la gestión del PSOE en la lucha contra ETA) presentan los populares. Con un 37-39% de sufragios está ya en 'números de campeón' y sus opciones se verían reforzadas en este nuevo escenario.

Apoyo a la negociación
Los socialistas, con votantes menos fieles que los del PP (casi ocho puntos por debajo), deben confiar en el trasvase de votos nacionalista para evitar que la distancia con su rival se diluya definitivamente. Cabe recordar, no obstante, que durante el periodo de 'alto el fuego permanente' una amplia mayoría de españoles respaldó la negociación con la banda terrorista.

Según el Instituto Opina, este porcentaje alcanzó el 77% en febrero de 2006, periodo en el que también se cuestionaba el papel de la oposición (contraria a cualquier contacto con ETA) en el proceso: el 67% se mostraba entonces en desacuerdo con la beligerancia del PP. Ahora bien, los sondeos han reflejado un retroceso en el apoyo ciudadano a Zapatero (a pesar de que tampoco ha recalado en el ideario popular), más intenso en los días inmediatamente posteriores a las acciones de ETA.

Sin embargo, este tipo de sucesos suelen plasmarse en una mayor participación, circunstancia que tradicionalmente ha beneficiado a la izquierda. El espacio de mejora del PP es, de hecho muy reducido. Techo y suelo electoral están prácticamente pegados, distanciados por apenas 2-3 puntos. Esta singularidad garantiza a los populares resultados muy competitivos, pero resta 'punch' final entre los electores de centro.

Además, la escasa 'cintura política' de Rajoy reduce su capacidad para formar Gobierno en caso de no conseguir mayoría absoluta. Enfrentado con los nacionalistas gallegos, vascos, navarros y catalanes, el presidente del PP ha asegurado que no retirará el recurso de inconstitucionalidad en contra del Estatut. CiU queda, por tanto, descartado de antemano.

Más allá de sus filas, las únicas opciones proclives a un pacto de Gobierno con el PP serían los regionalistas canarios (acorralados por el auge del PSOE en esta autonomía) y UPyL, la formación de Rosa Díez. Dos partidos que, salvo monumental sorpresa, no se harán el 9M con un gran número de escaños.

A pesar de todo, el triunfo del PP en estos comicios no es ciencia-ficción. Ni mucho menos. Un descenso en la participación socialista dejaría en bandeja la presidencia del Gobierno a Mariano Rajoy. Aunque el terrorismo no se ha destacado como el principal eje de la campaña popular, en manos del binomio economía-inmigración, continúa albergando una posición de privilegio en su ideario político.

El PP goza de buena imagen en materia antiterrorista (firme, expeditivo, etc.) y lo explotará al máximo. Rajoy tiene ante sí una nueva oportunidad para conseguir lo que ya le negaron las urnas en 2004. Ni si quiera es necesario vencer en número de sufragios. La Ley d'Hont da proporcionalmente más peso a las provincias menos pobladas, dominadas mayoritariamente por el PSOE. ¿Si lo consiguiera....podría formar gobierno? La cita, el próximo domingo 9 de marzo.

jueves, 6 de marzo de 2008

Ausencia

Me fui. Desaparecí un mes sin dejar rastro. A pensar, a trabajar, a ver. Hoy regreso al blog con casi con las mismas incertidumbres. Miento. El tránsito no fue en vano. En este tiempo, he adquirido un compromiso. Sí, para toda la vida. He superado vértigos, dolores de cabeza, y me he comprado un piso. Tal cual.

Tardaré un tiempo en irme pero es un gran paso adelante. Enorme. Y me gusta porque no suelo estar habituado a embarcarme en estas empresas. Yo mismo me he sorprendido. Prometo enseñároslo.